Cuenta la tradición que Santiago habría nacido en Betsaida (Galilea), siendo hijo de Zebedeo y María Salomé y hermano mayor de San Juan Evangelista.
Narran las leyendas del principio de la cristiandad que realizó una gran labor de evangelización en la tierra hispana que le correspondió en el reparto que los Apóstoles realizaron con el fin de difundir el Evangelio de Cristo.
Recorrió los caminos de Itálica, Mérida, Coimbra, Braga, Iria, Lugo, Astorga, Palencia, Horma, Numancia y Zaragoza (Caesaraugusta), donde se le apareció la Virgen en el Pilar hacia el año 36.
Después, por el Ebro, pudo tomar la Via Augusta de Tortosa a Valencia, Chinchilla y Cazlona para regresar a Palestina desde un puerto situado entre las actuales Murcia y Andalucía.
Allí, por orden de Herodes Agripa, rey de Judea, nieto de Herodes El Grande, fue decapitado a la espada hacia el año 44, convirtiéndose en el primer apóstol en verter su sangre por Jesucristo.
Cuenta la tradición que sus restos fueron recogidos por cristianos y llevado a orillas del mar, desde donde sus discípulos habrían trasladado su cuerpo por el Mediterráneo en una mítica embarcación de piedra y, tras costear el Atlántico, llegaron a Galicia, remontado el río Ulla, deteniéndose junto a Iria Flavia, en un lugar ocupado por un antigüo cementerio romano (compostum).
Allí, el cuerpo permaneció ignorado, hasta que a principios del siglo IX una luz sobrenatural señaló la ubicación del sepulcro. En el lugar conocido entonces como Campus Stellae (Campo de la Estrella), el obispo Teodomiro mandó construir un templo, hacia el que comenzaron a dirigirse los peregrinos para venerar al Santo, en lo que es hoy Santiago de Compostela.
Fueron dos los Reyes que en los primeros tiempos brindaron mayor apoyo a la ruta jacobea: el navarro Sancho III el Mayor y el castellano Alfonso VI.
Con ellos, se realizaron infraestructuras en el Camino, tales como calzadas y puentes, dotándolo de lugares asistenciales para el peregrino. Para ello fueron fundamentales las órdenes religiosas hospitalarias, ocupando un lugar destacado la de Cluny.
Como todos los años, la Xunta de Galicia ha desarrollado un amplísimo programa para celebrar éste 25 de julio.
Los Reyes de España presidirán los actos oficiales de festividad del día del apóstol Santiago, en la compostelana plaza del Obradoiro.
La presencia de sus Majestades coincide con la celebración en 2010 del año xacobeo, que congrega a miles de peregrinos y caminantes de diversos puntos de Europa.
(Vídeos de youtube, en gallego contando la historia de los fuegos. Aguardo que los entendais y sobretodo disfruteis de ellos para algún día vivirlos en directo). Ángel.